La piel está formada por numerosas capas. La más superficial, llamada epidermis, actúa como una barrera protectora para las capas de piel más profundas y sensibles.
Uno de los problemas más comunes que presenta la piel de los pies son los callos o callosidades. Continúa leyendo para conocer por qué se forman, qué hacer para evitar que aparezcan y cómo tratarlos para curarlos lo más pronto posible.
¿Qué son los callos y por qué aparecen?
Los callos son áreas engrosadas y endurecidas de la piel que se desarrollan como respuesta a la fricción o presión repetida. Cuando la piel se expone de manera prolongada a estas fuerzas, como al usar zapatos que lastiman continuamente, reacciona creando una capa callosa en la superficie, generalmente en los dedos de los pies o en la parte trasera del talón. Si la presión persiste en una zona específica, esa piel endurecida puede formar un callo con un núcleo rígido, conocido comúnmente como 'raíz', que penetra en las capas más profundas de la piel, causando dolor y molestias.
Cómo identificar un callo
Apariencia
La apariencia de los callos pueden ser blanca-grisácea, o bien amarilla-café, dependiendo del tipo de piel.
Síntomas
Dolor e inflamación alrededor del callo e incomodidad al recibir presión directa al caminar.
Zonas comunes donde aparecen los callos
¿Cómo prevenir y tratar los callos?
Puede parecer obvio, pero lo primero que debes hacer es eliminar la presión para aliviar el dolor.
Además, elige zapatos que te queden cómodos y protege el callo con un Apósito para Callos Hansaplast®, que detendrá la presión y mitigará el dolor, mientras que su ingrediente activo, el ácido salicílico, trabajará para remover el callo.
Remueve los callos de una manera fácil y rápida
En Curitas, tenemos la solución ideal para eliminar los callos y aliviar el dolor que provocan: el Apósito para Callos Hansaplast®. Este innovador producto te brindará alivio inmediato mientras trabaja para remover los callos gracias a su efectivo ingrediente, el ácido salicílico. Sigue estos tres simples pasos:
Paso 1
Después de limpiar y secar muy bien el área afectada, aplica el Apósito para Callos Hansaplast® colocando el centro del anillo de espuma directo sobre el callo. Déjalo actuar y cámbialo por uno nuevo después de dos días.
Paso 2
Pasados cuatro días, el callo deberá estar suave y podrá ser eliminado con un baño tibio de agua salada, o con jabón. No intentes eliminar el callo con objetos afilados como navajas.
Paso 3
Después de eliminarlo, mantén el área del callo y la piel que lo rodea bien humectada con cremas especiales para pies.
Importante
Nunca intentes eliminar el callo con un objeto afilado.
Si el callo no desaparece o si sigue teniendo un núcleo doloroso, mejor consulta a un podólogo.
Si sufres de diabetes o de trastornos circulatorios, evita usar los productos de Curitas® especiales para callos, y consulta a tu podólogo o a tu médico.
Por favor lee las instrucciones de uso del producto para información adicional.
Recomendaciones de una experta
La Dra. Maike Kuhlmann, de Investigación y Desarrollo en Beiersdorf AG, explica cómo funciona el Apósito para Callos Hansaplast® para eliminar los callos de manera eficiente. Según explica, el parche contiene un ingrediente activo clave: el ácido salicílico, ubicado en el centro del anillo de espuma. Este ácido actúa suavizando el callo y aflojando su estructura, sin separar las células córneas que lo conforman.
Tanto la piel callosa como la sustancia intercelular que mantiene unidas a las capas de piel del callo se relajan, facilitando una mayor hidratación y suavizando el área, así que el callo puede ser desprendido fácilmente.
Conoce mejor los Apósitos para Callos Hansaplast®
- Alivia de inmediato el dolor ocasionado por fricción y presión, ayudando a eliminar el callo.
- El suave anillo que tiene al centro ayuda a acolchonar el área afectada.
- Contiene Ácido Salicílico que suaviza el callo para que pueda ser eliminado fácilmente.
¿Cómo prevenir y tratar los callos?
La mejor manera de prevenir un callo es siempre mantener tus pies en buenas condiciones y usar los zapatos adecuados. Sin embargo, los puntos de dolor, callos y piel callosa son un problema común, y tienden a aparecer más frecuentemente con el paso de los años.
Lo que puedes hacer para prevenir los callos:
Elige zapatos cómodos y varía de zapatos con cierta frecuencia. Esto te ayudará a prevenir la presión ocasionada por zapatos demasiado apretados, que dejan marcas en los dedos de los pies.
Cuida tus pies diariamente con cremas humectantes para pies secos para ayudar a reducir la piel áspera en las zonas que están constantemente expuestas a mucha presión. Cuando aparezcan los primeros signos de un callo, te recomendamos humectarlo con crema hidratante.
Además de seguir estos consejos, recuerda la importancia de consultar a un médico especializado cuando sea necesario. Así podrás cuidar de tu bienestar con atención profesional y adecuada. Cuenta con nosotros para acompañarte en tu camino hacia una mejor salud.
